viernes, 9 de enero de 2009

Nuestras circunstancias no eran las mejores. Nos entrelazamos cuando menos lo esperaba y en un abrir y cerrar de ojos, la ruleta giró sin parar, hasta llegar a donde estamos hoy. Entre el Porque y el Destino. Cuando me sumé a este juego, pensé que mientras me mantuviera al margen de esto, nadie iba a salir herido, pero me equivoqué sabes? Porque al poco tiempo era yo quien había salido lastimada. Era yo quien buscaba olvidarte para borrar las heridas. Y ahora soy yo (esa misma que hace unos meses no movía ficha si saber de antemano tu jugada) quien deja de buscarte, llamarte, mirarte, sentirte. Soy esa misma de hace unos meses, pero digamos que... una versión mejorada; con pensamientos más simples y menos retorcidos que antes. Por lo tanto, sé y entiendo que no debo volver a lo que paso. Sí debo, concentrarme en lo que va a venir, que no parece ni bueno ni malo, solo parece... Quien sabe, la vida da tantas vueltas, que en una de ellas, la sortija obtienes y consigue lo que quieres.

No hay comentarios: