Ya había desilusión, dolor y resigna
ción de mi parte. El tiempo supo esperar y
lo aterosé en lo mejor de mi. Allá, bien lejos. No había más que decir, había llegado el fin... Estaba aprendiendo como vivir. Costaba, pero el esfuerzo era notable. Ya de ti me olvidaba cuando te ví, con la mirada desesperada. Y aceptemoslo, fue tan fuerte volver a verte, sufrí tanto tiempo por ti. Pero sé que basto con mirarte, recuperarte y saber que te irías de a poco, sin mí.